La Agencia Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos autorizó a una empresa privada con sede en Florida realizar vuelos a la Luna con sondas robotizadas, abriendo una nueva era de explotación del satélite terrestre.
Moon Express, con base en Cabo Cañaveral (Florida), ha recibido la aprobación para enviar una sonda con capacidad de alunizar y “relocalizaciones” con pequeños “saltos”, informó este miércoles el organismo.
“La FAA ha determinado que el lanzamiento de la sonda no pone en peligro la salud pública, seguridad de personas y propiedad, los intereses nacionales o de política exterior las obligaciones internacionales”, indicó la FAA en un comunicado.
La misión de Moon Express, bautizada como MX-1E, tiene la intención de abrir un nuevo sector industrial, la minería lunar, con la extracción de platino o helio-3, el combustible para plantas de fusión que aún no existen y su viabilidad solo ha sido detallada por la ciencia ficción.
No obstante, con la autorización de la FAA, Moon Express se posiciona como favorita para ganar el Google X Lunar Prize, concurso en el compiten más de una docena de pequeñas empresas con el objetivo de obtener un dotación de 20 millones de dólares.
Este hito, más administrativo que tecnológico, supone la primera vez que las autoridades estadounidenses interpretan y otorgan un marco legal al Tratado del Espacio Exterior.
El acuerdo internacional asegura que “las actividades de entidades no gubernamentales en el espacio exterior, incluida la Luna y otros cuerpos celestes, deben requerir la autorización y continua supervisión de los estados parte de este tratado”.
La agencia aeroespacial estadounidense (NASA), se ha pasado más de cuatro décadas, desde la misión del Apolo 17, sin poner el pie en la Luna.
La NASA y el Gobierno estadounidense quieren ahora abrir la posibilidad, como ya ocurre con las misiones de carga a la Estación Espacial Internacional, de que en la exploración espacial participe la iniciativa privada.