El caso del mexicano Roberto Esquivel Cabrera, saltó a luz hace seis años, al poseer lo que probablemente es el pene más grande del mundo.
Este habitante de la ciudad de Saltillo tiene un miembro que mide 48,21 cm para ser exactos. Un hecho que, en su momento, le producía una enorme satisfacción. Así, declaraba en 2017 ser enormemente feliz sabiendo que «nadie» tiene un miembro similar al suyo.
Ahora, la historia ha cambiado, pues esos más de 48 cm le imposibilitaban llevar una vida normal y aunque soñaba con entrar a los Guiness récords, nunca fue tomado en cuenta.
«Soy feliz con mi pene. Sé que nadie tiene un tamaño como el mío. Es algo que me distingue del resto de personas y eso me hace feliz», declaraba.
Pero los problemas por su tamaño han ido a más en los últimos años. No puede mantener relaciones sexuales, pese a su virilidad, tampoco caminar bien, agacharse y hacer ciertos movimientos. Con todo, el Estado mexicano lo considera «una persona discapacitada».
¿Qué te parece la historia de Roberto?