La Fiscalía General de Michigan publicó un informe devastador que revela una extensa investigación sobre casos de mala conducta sexual en la Diócesis de Lansing, con acusaciones que se remontan hasta la década de 1950, implicando a casi medio centenar de religiosos.
La exhaustiva investigación, iniciada tras una orden de allanamiento en 2018, identificó a 56 presuntos perpetradores, incluyendo 48 sacerdotes, tres hermanos religiosos, un supuesto exhermano religioso y cuatro diáconos.
El período más crítico de estos presuntos abusos se concentró durante las décadas de 1970 y 1980, según documenta el informe.
Los investigadores basaron sus hallazgos en una amplia recopilación de evidencias que incluye entrevistas con sobrevivientes, más de 1,100 denuncias públicas y millones de archivos digitales proporcionados por la diócesis.
El informe representa uno de los estudios más completos sobre abusos eclesiásticos realizados en los Estados Unidos.
Este caso se suma a una serie de investigaciones similares realizadas en diferentes estados norteamericanos que han expuesto patrones sistemáticos de abusos dentro de la Iglesia Católica, contribuyendo a un esfuerzo nacional por hacer justicia a las víctimas y establecer medidas preventivas para el futuro.