Para el mediodía de este viernes está programada la audiencia inicial en contra del sujeto Sergio Antonio Olivares López, de 33 años, quien fue acusado por el femicidio de Anielka del Carmen Espinoza Mayorquín, de 34 años.

La remisión a juicio fue realizada el pasado sábado 18 de octubre durante la audiencia preliminar realizada en el Juzgado Cuarto Especializado en Violencia de Managua, a cargo del doctor Harold Javier Leal Díaz, ante quien fue realizada la acusación.
De acuerdo con el libelo acusatorio, Olivares López tenía como profesión, periodista y operador de cámara, y ante la pregunta de la autoridad judicial de que si entendía los hechos por los cuales se le acusa, el detenido respondió: “Sí, lo comprendo”.
Durante la audiencia preliminar el defensor técnico, licenciado Donald Soza solicitó que al acusado se le concediera arresto domiciliar, presentación periódica y constitución de custodia, mientras de confirmaba su culpabilidad en el femicidio, lo que fue denegado por el juez, quien lo dejó en prisión preventiva.

Anielka del Carmen Espinoza fue ultimada a cuchilladas en el cuello y el tórax el pasado miércoles 15 de octubre, cuando Sergio Olivares entró sin permiso a su casa ubicada en el barrio Jonathan González, de Managua.
Don Roberto Saravia, tío materno de la víctima, dijo que Sergio Olivares actuó motivado por la obsesión enfermiza que tenía hacia Anielka, con quien tuvo una corta relación hace más de un año.
El señor Saravia indicó que Anielka rechazaba a Sergio, en tanto mantenía una bonita amistad con un ex novio, con quien salía si ningún compromiso a distintas partes.
El familiar de la ahora víctima agregó que al entregarse a la Policía, Sergio Olivares confesó que tras cometer el crimen, robó el celular y una cámara de seguridad de la víctima, y luego los quebró y tiró en la calle.
En su confesión también reveló que un dispositivo “Alexa” que Anielka tenía en su casa, lo metió en el tanque del inodoro y el “router” del internet en el Freezer de la refrigeradora, donde fueron encontrados.
En la revisión minuciosa de la grabación de la cámara de seguridad instalada frente a la vivienda de Anielka, se descubrió que Sergio Olivares, llegó en dos momentos a la casa de la víctima.
La primera fue a eso de las 8 de la noche del miércoles, cuando sin ninguna autorización, ingresó a la sala del inmueble, discutió con la víctima, apagó las luces y le quitó la vida en la entrada de su cuarto.
Salió del inmueble a eso de las 9 de la noche y huyó en un carro de transporte privado que pidió por celular, y luego regresó con una mochila a la casa de su víctima a eso de las 9:45 de la noche, pero solo dilató 20 minutos.
El mediodía del jueves se trasladó a una estación policial y viendo a los oficiales les dijo: “vengo a entregarme, maté a mi novia… el cuerpo está en su casa” y acto seguido lo esposaron e iniciaron las investigaciones del caso.
Anielka Espinoza Mayorquín fue sepultada la mañana del sábado, en el cementerio Puertas del Cielo, en el barrio Milagro de Dios, en Managua.