Rata Blanca brilló con su tormenta eléctrica en el Polideportivo Alexis Argüello

En una noche electrizante en el Polideportivo Alexis Arguello, la icónica banda argentina de hard rock y heavy metal Rata Blanca ofreció un concierto que quedó grabado en la memoria de sus apasionados seguidores.

Desde el momento en que las luces se atenuaron y el rugido de la multitud llenó el aire, quedó claro que esta sería una experiencia musical única.

La banda comenzó su actuación a eso de las 10:20 de la noche, con uno de sus éxitos más emblemáticos, La Leyenda del Hada y el Mago, desatando una oleada de emociones entre el público.

La voz inconfundible de Adrián Barilari y el sonido de los músicos de la banda crearon un ambiente lleno de energía.

El setlist también incluyó clásicos como Mujer Amante, que hizo que la audiencia coreara cada palabra, fusionándose la energía en el escenario con la pasión de los fans, creando una atmósfera de unidad y celebración de la música.

“Gracias Nicaragua”, dijo Adrián Barilari, el cantante de la banda y siguió con los temas Solo para amarte, Volviendo a casa y El beso de la bruja.

Rata Blanca, quien estuvo en tierra pinolera en el año 2008, nuevamente revivió sus éxitos más grandes, cantando las nuevas rolas de su discografía, demostrando que su creatividad y talento siguen siendo inquebrantables con el paso de los años.

La ejecución impecable de cada miembro de la banda fue un testimonio de su dedicación a la excelencia musical.

El concierto culminó con una ovación ensordecedora de los fans de Rata Blanca, que demostró una vez más que sus éxitos están presentes en el corazón de seguidores, demostrando que su música es atemporal y su pasión por el rock sigue ardiendo con fuerza.

Previó a su presentación los encargados de calentar motores, fue el grupo nacional Cripta y luego Carga Cerrada, que durante dos horas pusieron a corear sus éxitos musicales.

También hicieron entrega del ganador de una guitarra firmada por integrantes de Rata Blanca quien fue un joven de Diriamba, Carazo, quien no contuvo las lágrimas al momento de recibirla.

Pero el concierto no solo atrajo a los nicaraguenses, sino también a extranjeros como el hondureño Edwin Morales, quien junto a uno de sus hermanos, salieron de Tegucigalpa, a las siete de la mañana, y llegaron a Managua a las 03;30 de la tarde, dándoles tiempo solo de cambiarse y trasladarse al Polideportivo Alexis Arguello.

“Fueron varias horas de viaje, pero valió la pena, concurse y me gane una camiseta de Rata Blanca, además me gusta mucho la organización, el escenario y el este complejo deportivo, es impresionante el montaje”, destacó el catracho Edwin Morales.

Si te gustó, comparte

Más Noticias