Aparentemente, un fulminante paro cardíaco cegó la tarde de este domingo, la vida de Nora Rosa Rojas Cerda, de 75 años de edad, cuando participaba en un culto evangélico en una iglesia ubicada en el barrio Milagro de Dios de la capital.
“Estábamos alabando al Señor, y de repente ella se desvaneció, la levantamos y trajimos al hospital”, dijo una hermana en Cristo de doña Nora Rosa, quien era oriunda del municipio de Jinotepe, Carazo.
Los médicos no pudieron hacer nada por doña Rosa Nora, pues sus signos vitales ya habían desaparecido. El cadáver fue trasladado a la morgue del centro asistencial, a la espera de ser retirado por sus familiares.