Julio Francisco Montalván Flores, de 23 años, intentó partir de este mundo tomando una porción del potente insecticida llamado Cipermetrina, en su casa situada en el municipio de Mateare, en Managua.
Una prima de Julio fue quien lo encontró vomitando en el cuarto de su casa, por lo que de inmediato lo llevaron al hospital Antonio Lenin Fonseca, en donde se encuentra con pronósticos reservados.
A ese mismo hospital capitalino fue llevada Kenia Isabel Mojica Morales, de 32 años, quien intentó acabar con su vida, comiendo cajetas mata ratas, por causas que se desconocen en su casa ubicada en Batahola Norte, en Managua.
Al encontrarla vomitando el veneno y a punto de convulsionar, familiares trasladaron a Kenia Mojica al centro asistencial donde le realizaron un lavado gástrico para reducir los efectos del veneno y tratar de salvarle la vida.