El salvadoreño Joaquín Balladares Narváez, de 67 años, se rindió ante la muerte a las 2 y 30 minutos de la madrugada de este lunes en el hospital Manolo Morales Peralta, casi 24 horas después de haberse tomado una tableta para preservar granos básicos.
Balladares Narváez habitaba de los semáforos del Ministerio de Gobernación tres cuadras al Este y media al norte, en el barrio 19 de Julio, de Managua, de donde fue trasladado al hospital a las 5 y media de la mañana del domingo, con los síntomas de intoxicación.
Al centro asistencial se hicieron presentes miembros de la Policía a investigar el caso y conocer el reporte médico por parte del personal de turno. Se supo que después del deceso del salvadoreño, al hospital no se había presentado ningún allegado en busca de información.