Una vivienda infestada de garrapatas fue incinerada en el municipio de Tlahualilo, Durango, México, donde habitaban cuatro miembros de una familia, los cuales fueron contagiados por “rickettsia”, una enfermedad mortal transmitida por las pulgas y garrapatas.
Según las autoridades las condiciones de vida de los miembros de la familia integrada por una mujer de 31 años, su hija de 6, un hombre de 47 años y otra mujer de 72, eran “infrahumanas”, pues su vivienda estaba literalmente invadida por los ácaros, incluso una de las personas fallecidas presentaba doce ectoparásitos en el cuerpo, describió la doctora Magdalena Centeno Tinoco, Directora de los Servicios de Salud en Durango.
Apuntó que la presencia de garrapatas en el domicilio de esta familia parecía como si se tratara de hormigueros, “el piso, paredes, muebles y principalmente colchones estaban infestados de manera grave” dijo.
A pesar de que el personal de la Secretaría de Salud llegó a la vivienda con líquidos de la plaga, la cantidad era tal, que se determinó finalmente incendiar el domicilio ante la imposibilidad de un control al 100%.
“La vivienda se inspeccionó y la cantidad de garrapatas eran como hormigueros, tenían unos perros que fueron echados a la calle y se están buscando porque es seguro que son portadores de las garrapatas”, dijo la
Directora de los Servicios de Salud.
Destacó que además de revisar a la familia, se hará un cerco de 27 manzanas a la redonda donde el personal rociará líquido para quitar las garrapatas de los perros.
