Abnegafa hija, madre y esposa así la describen las personas cercanas a Doña Juana de los Ángeles Espinoza, de 42 años de edad.
Sus 20 años en la cocina le ha permitido llevarse en el saco a todos los que llegan a su comedor, ubicado en el sector de la parada de interlocales de la UCA, quienes al probar su cuchara se hacen clientela fija.
Doña Juanita empezó a ganarse la vida desde los 13 años de edad, estudiaba y a la vez le ayudaba a su madre Doña María García Brenes a vender en un tramo en el mercado Oriental.
A la edad de 17 años se enamoro y termino casandose, procreo 4 hijos, rehízo su vida con otra persona y siendo ama de casa nunca le gusto depender de nadie y cuidaba a sus muchachos y vendía comida en su humilde casita.
Espinoza soñaba tener su comedor y hasta hace poco tiempo que logro instalarlo con mucho esfuerzo, trabaja junto a su hijo mayor y le da empleo a dos personas más.
Diariamente invierte entre cuatro mil a cinco mil córdobas, oferta una gran variedad de platillos como cerdo asado, desmenuzada, arroz aguado, carne tapada y sopa.
Ella sabe de negocios y en la variedad está el éxito, comentó su orgulloso hijo Moisés Vidal Palacios.
Moisés dijo que diariamente venden entre 45 a 50 platillos entre desayuno y almuerzo.
Soy su más fiel admirador y todos los días me hace aprender más de su tenacidad, dijo conmovido Vidal Palacios.