Salvar la vida de personas con insuficiencia renal crónica y cáncer, es una tarea que demanda altos costos económicos, pero que también requiere la puesta en práctica del profesionalismo y humanismo de los médicos, cuyo trabajo es loable y dedicado.
En Nicaragua, son enfermedades cubiertas por el Seguro Social y precisamente, están catalogadas como de “alto costo”.
En el hospital SERMESA/Cruz Azul, se da tratamiento de hemodiálisis a 336 pacientes divididos en 4 turnos que inician a las 6:30 de la mañana y concluyen a las 12:30 de la noche, los 365 días del año.
El programa solamente en ese hospital realiza 3,900 sesiones al mes, cada una de ellas a un costo de 75$ dólares que son desembolsados por el Instituto de Seguridad Social, al centro hospitalario por cada paciente.
El Director de Hemodiálisis del centro hospitalario, explica que la hemodiálisis es una terapia sustitutiva renal que se realiza a pacientes con insuficiencia renal crónica, es decir, aquellos cuyos riñones dejaron de funcionar.
“Si nosotros vemos este primer cuatrimestre, ya hablando, incluido abril, ya llevamos 23 millones de córdobas que la Seguridad Social nos ha pagado a SERMESA para la atención de estos pacientes. Aquí se les brinda el medicamento, se les brinda la atención médica, atendidos por un especialista”, asegura.
Testimonios de la atención
Francisco Javier Sánchez Gómez, llegó de Granada a Managua, hace 10 días, a recibir su tratamiento. Cuando el padecimiento lo atacó tenía apenas 3 meses de haber cotizado al INSS.
“Yo esto no se lo recomiendo a nadie. Que caiga en este estado, cuando ya los riñones no te funcionan, cuando ya no estás orinando. Esto es un proceso duro, duro para la familia, para nuestros hijos y duro para nuestra economía”, cuenta.
La atención recibida, afirma, ha sido de gran calidad, con gran calidez humana y con alta especialización técnica.
“Que el seguro nos cubra esto, esto es una maravilla. Primeramente nuestro Dios sobre todas las cosas, porque sé que él abre puertas, como estaba contando anteriormente, yo solo tenía tres meses laborando en la empresa, salía mi primera colilla y de inmediato me empezaron a dar una excelente atención”, afirma.
“Hay que ponerse la mano en la conciencia”
Afirma que su condición no la desea a nadie y que es necesario salir en defensa de los derechos como este, al que ha logrado tener acceso.
Considera necesario fortalecer al INSS para garantizar a futuro las mismas y mejores condiciones a pacientes que necesiten tratamientos que salven sus vidas.
“Hay que ponerse la mano en la conciencia y hay que tener compasión hacia las demás personas que estamos pasando éste proceso. No es fácil, a nadie se lo deseo. Usted sabe que tal vez los demás están buenos, tal vez están con su buena salud, pero uno está pasando esto”, lamenta.
Una mano amiga en la lucha contra el Cáncer
En el Hospital Central de Managua hay ingresados 2,010, pacientes por cáncer en sus diferentes tipos, de ellos 1,536 activos.
156 pacientes reciben tratamientos de quimioterapia, cuyo costo por sesión puede llegar hasta los de C$90 mil córdobas. Además de ellos, son más de 500 los que reciben hormonoterapia.
“Estos servicios vienen del Seguro Social, que ellos benefician al paciente a recibir este tratamiento. Gracias a Dios; sí es vital, porque la sobrevida es de 87% de los pacientes”, precisa la Doctora Irela Pineda García.
Norma del Carmen López lloró y suplicó a Dios inmensamente por su misericordia en el momento de conocer su diagnóstico. Se encomendó al Creador y se dispuso a las manos de los médicos, de quienes ha recibido un trato muy bueno.
“No es cosa fácil cuando a uno le diagnostican una enfermedad… peor de ésta naturaleza, pero yo le decía a mi Dios: Señor, si tú me lo regalaste, tú tienes tu propósitos. Tú sabrás por qué me estás poniendo este ramillete de flores. Yo le dije que era un ramillete de flores el que me estaba poniendo en el pecho, porque el cáncer lo tengo en la mama”, asegura.
Es maestra con disfonía (trastorno en la voz), tras los largos años educando nuevas generaciones y considera que ha encontrado una mano amiga en la lucha por recobrar su salud.
“La atención en este centro, en éste hospital es maravillosa, el seguro es muy bueno. La atención es excelente, son bien humanistas, sobre todo los médicos, desde diciembre que fue mi primer experiencia”, cuenta.
El Seguro Social en Nicaragua brinda una atención con un trato humanista, enfocado en la salud del paciente, pero también tomando en cuenta su condición emocional.
Además de los tratamientos principales, son entregados medicamentos y medios que se requieran para garantizar su bienestar.