Su Eminencia Reverendísima Cardenal Miguel Obando y Bravo, a su llegada esta noche al Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, procedente de Roma, dijo que “es fue dicha estar presente en la ceremonia de canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII”.
Compartió que oró frente a las tumbas de los papas elevados a la santidad, “les pedimos para que sigan bendiciendo al pueblo nicaragüense, a la ciudadanía que lo recibió en dos ocasiones y que derrame bendiciones sobre el presidente Daniel Ortega Saavedra.
Además de pedir por más bendiciones para el papa Francisco, el Cardenal Miguel, resaltó que acompañó al papa Francisco, en una eucaristía en la que también participaron unos 170 cardenales.
“Me sentí muy contento de estar presente en la canonización de Juan Pablo II, porque él era mi amigo, quien me invitó muchas veces a viajar a Roma donde él, y espero que desde el cielo bendiga a este pueblo de Nicaragua que le demostró su cariño y su entusiasmo”, expresó el purpurado Miguel Obando y Bravo.