“Después de un gustazo, un trancazo” cita el viejo y conocido refrán que le cae como anillo al dedo a Santos David López Mercado, de 30 años, quien casi es asesinado a machetazos después de haber disfrutado de un casamiento.
El hecho se registró en la comunidad La Joba, en Wiwilí, Jinotega, cuando Santos David se dirigía a su casa, sin imaginarse que en el trayecto se toparía con su cuñado Moisés Pérez Mercado, de 26 años.
En el camino, Moisés le dijo a su cuñado: “Ve Santos, lanzate un trago de guaro conmigo… después le digo a mi hermana que estabas tapineando conmigo para que no te regañe”.
Sin embargo, Santos David despreció la oferta de su cuñado, por lo cual Moisés Pérez desenvainó su machete y le asestó un filazo en un brazo a su cuñado.
La agresión llamó la atención de doña María Mercado quien intervino en el bochinche para que Moisés Pérez no terminara asesinando a su cuñado.
El lesionado fue trasladado al hospital primario de Wiwilí, Jinotega. En tanto, su agresor huyó con rumbo desconocido con intenciones de seguir bebiendo guaro.