“A peso, a peso, agua helada a peso”, es el grito que todos los capitalinos que viajan en bus y andan a pie, quieren escuchar para poder comprar su respectiva bolsita y calmar el calor que se vive a diario durante el verano.
Don Carlos Méndez Pérez, de 38 años de edad, conocido en el gancho de camino del mercado oriental, como “el agüita”, y habitante del barrio Cristo del Rosario, destacó que desde el mes de marzo están obteniendo jugosas ganancia con la venta de bolsas de agua helada, vendiendo hasta 500 bolsitas diario. También ofrece variedad a sus clientes con los juguitos a 3 córdobas y gelatinas a dos córdobas.
“Todo vende agua helada, tiene que ser descobije”, dice don Carlos quien tiene 16 años de dedicarse a este bisne, y tiene que estar “Ojo al Cristo” viendo a las personas que van al lado de la ventanilla en los buses y todos lo que están en las paradas, que siempre quieren comprar agua.