“Con la mano de Dios y en nombre de Cristo Jesús no tememos a nadie, somos vencedores, un pueblo que se conoce su valor, su entereza, su capacidad de trabajo, un pueblo que va adelante precisamente desplegando todas esas habilidades, certezas, todo ese aprendizaje de vida, desplegando todo ese talento fenomenal del pueblo nicaragüense”, reafirmó.

“Así somos, así nos queremos, y así vamos al 2019 un año en el que nos ilumina un sol que no declina. Y ese sol alumbra desde ya todas las nuevas victorias. Victorias culturales, victorias espirituales, victorias materiales, victorias de la fe, de la confianza y la esperanza en Cristo Jesús, en Dios Nuestro Señor, en la sabiduría del pueblo nicaragüense”, dijo.

Destacó que la fortaleza del pueblo nicaragüense está precisamente en el amor, “somos fuertes porque sabemos querernos, somos fuertes porque sabemos levantar con orgullo banderas de paz, banderas de paz y bien en toda nuestra sagrada geografía”, expresó.

“Somos fuertes porque estamos llenos de entendimiento, somos fuertes porque hemos aprendido, tenemos un poco más, al cerrar este año, de sabiduría, tenemos sobre todo prudencia, paciencia, serenidad para enfrentar y transitar exitosamente a través de los desafíos, de los tiempos complejos, de las complicaciones, de las dificultades”, dijo.

“Somos fuertes porque estamos llenos de sentidos y de valores de familia, de comunidad; somos fuertes porque tenemos una cultura valiosa de familia, de comunidad, una cultura local que nos distingue y nos defiende, local y nacional; sabemos preservar nuestra identidad”, reiteró.

“Sabemos mantenernos con nuestras raíces atravesando todo lo que hacemos, raíces culturales, valores culturales, identidad y valores, para enrumbar hacia delante sin olvidar quiénes somos, hacia dónde vamos, qué queremos”, aseguró.

“Nosotros todos los días damos a gracias a Dios porque somos fuertes, porque nos bendice con confianza y fortaleza, Job 4 dice:

Nuestro temor a Dios, tu confianza

No es tu esperanza, la integridad de tus caminos

Qué inocencia se ha perdido

¿Adónde han sido destruidos los rectos?

Lo yo he visto, es que quienes aran maldad, iniquidad
quienes siembran injurias

Después la cosechan.

Perecen por el aliento de Dios,
Y por el soplo de su misma ira son consumidos.

Los rugidos del león, y los bramidos del rugiente,

Lo que aran iniquidad y siembran injurias

Y calumnias, difamaciones, después la cosechan,

Perecen por el aliento de Dios y por el soplo de su misma ira

Son consumidos.

Cuánto más los que habitan en casas de barro,

Cuyos cimientos están en el polvo,
Y que serán quebrantados por la polilla!

De la mañana a la tarde vemos su destrución
Y se pierden para siempre, y  nadie repara en ello

Su hermosura, ¿no se pierde con ellos mismos?
mueren sin haber adquirido sabiduría.

“Job 4, nuestro amor a Dios es nuestra confianza, la integridad de los caminos que queremos recorrer es nuestra esperanza y los que aran inequidad y siembran injuria, lo hemos visto a lo largo de nuestras vidas, después la cosechan”, señaló.

“Sembrar vientos cosechar tempestades, sembrar inequidad, maldad, y después cosecharla, es así, es la ley de la vida. Lo que uno siembra eso cosecha”, sentenció.

Luego citó el texto bíblico Job 5.