Las inundaciones y corrimientos de tierra ocasionados por la tormenta tropical Trami han dejado al menos 24 fallecidos en Filipinas este jueves, tras azotar el noreste del país.
La tormenta, también conocida como Kristine en Filipinas, impactó la provincia de Isabela pasada la medianoche, con vientos sostenidos de hasta 95 km/h y rachas de 160 km/h, desplazándose hacia el Mar de China Meridional.
Las regiones más afectadas incluyen la zona de Bicol, donde al menos 20 personas, entre ellas 7 en la ciudad de Naga, murieron debido a riadas y lluvias equivalentes a dos meses de precipitaciones en tan solo 24 horas.
Los esfuerzos de rescate continúan, con miles de personas atrapadas, algunas refugiadas en los tejados. Las autoridades han desplegado 1.500 policías y están buscando lanchas adicionales para asistir a las víctimas.
El gobierno cerró escuelas y oficinas, excepto aquellas esenciales para la emergencia, y más de 75.400 personas han sido evacuadas. Con alrededor de 20 tormentas y tifones que afectan al país cada año, Filipinas sigue siendo vulnerable a desastres naturales de gran magnitud.