La angustia se acrecentó para los familiares de Ariel Armando Hernández Picado, de 32 años, quienes presumen que un cuerpo que fue localizado la noche del martes en la playa de Casares, en Jinotepe, Carazo, era el del joven tipitapeño.
El cuerpo fue ubicado en altamar por pescadores de la zona que debido al fuerte oleaje que sigue imperando en litoral del pacífico, no pudieron recuperarlo para trasladarlo a la costa.
Sin embargo le colocaron un trasmallo y fijaron la ubicación para extraerlo esta mañana, pero al llegar este miércoles al punto señalado ya no encontraron nada.
Desde en horas de esta mañana pescadores a bordo de 5 lanchas han navegado mar adentro para ubicar nuevamente el cuerpo que una vez más fue arrastrado por las olas.
A pesar de todo esto, familiares de Ariel Hernández están convencidos que dicho cuerpo es del joven tipitapeño que el pasado domingo fue arrastrado por las fuertes corrientes cuando se daba un chapuzón a playa Amarillo, localizada en el municipio de Tola, en el departamento de Rivas.
Al momento del suceso el joven disfrutaba de un paseo familiar con los que llegó procedente del barrio Noel Morales, de Tipitapa, donde deja una niña de 4 años en la orfandad.
