En el pasado mes de mayo Entertainment Weekly y Deadline informaban de que The Walking Dead, dejaría de contar con el alma de la serie desde que se estrenara en octubre de 2010, el sheriff Rick Grimes, interpretado por Andrew Lincoln.
Ahora, Lincoln ha querido despedirse de la serie y de sus seguidores con una emotiva e inesperada, en el que el actor destaca la «historia de esperanza, familia y amistad» que es en realidad The Walking Dead.
«Ha sido el papel más emocionante, desafiante y satisfactorio de mi carrera, y durante la mayor parte de una década, la aventura más grande de mi vida profesional», dijo.
«Gracias por venir con nosotros en este viaje. Por los nueve años de miedo, angustia, ira y, seamos sinceros, tripas que habéis soportado a superar estos 115 episodios y sumando. Y por los servicios al periodismo que van más allá de cualquier nivel civilizado de resistencia humana», comienza la carta.
«Según mis propios cálculos, he matado a más de 400 zombis durante el Apocalipsis. Perdí un caballo y encontré un caballo.
Perdí a una chica… y eso no salió bien. Una vez me comí a un perro. Llevé un poncho de carne dos veces. Escapé de un montón de caníbales. Sin mencionar que me dispararon dos veces, me golpearon con un bate de béisbol, me apuñalaron tres veces, le mordí la garganta a un hombre (lo siento, eso era raro, y sabía a pollo), y a mis botas de vaquero le cambiaron la suela… 12 veces».
«Ha sido un viaje salvaje, moldeado por la relación entre la serie y los seguidores de la serie, y en gran parte vosotros sois buenas personas de la prensa. Hasta que nuestros caminos se crucen de nuevo. Mantened la calma y llevad un machete rojo», finaliza la carta.