La tarde de ayer martes fueron llevados a su última morada en el cementerio del barrio Loma Linda, de Managua, los cuerpos de Silvia Busto, de 59 años y su hija Laura Elizabeth Escobar Busto, de 40 años; quienes murieron en un accidente de tránsito en el municipio de la Unión Juárez, Estado de Chiapas, México, el pasado 26 de agosto.
Doña Silvia y su hija Laura, pertenecían a una iglesia evangélica, tenían casi un año de vivir en México y perdieron la vida cuando la camioneta en que viajaban con un grupo de personas se volcó debido a fallas mecánicas y sobrecarga de pasajeros.
La tragedia además cobró la vida de otras seis personas y dejó nueve lesionados entre ellos dos adolescentes de 13 y 15 años, y dos niños de 4 y un año, hijos de Laura quienes quedaron en la orfandad, los que también llegaron ayer al país.
Alexander Escobar, hijo de Silvia y hermano de Laura, agradeció a las personas que colaboraron para poder recaudar los 9,500 dólares que costó la repatriación de los cuerpos vía terrestre.
El viaje se extendió desde el pasado sábado hasta el lunezs en horas de la mañana cuando llegaron al barrio San Judas, donde fueron veladas y posteriormente les dieron cristiana sepultura.