El nacimiento prematuro ya no es sinónimo de muerte en Nicaragua gracias a diferentes programas e iniciativas emprendidas por el Gobierno Sandinista, que tienen como prioridad, el cuido permanente y atención especializada a las embarazadas y sus bebés.
Una de estas decisiones es la modalidad “Mamá Canguro”, la idea es mantener al bebé piel a piel en el pecho de la madre, como lo haría un canguro con su cría, para proporcionar calor, contacto cercano y alimento.
Esta técnica es empleada en las más de 180 Casas Maternas que se han construido en el país, iniciativa que Tu Nueva Radio Ya pudo conocer de cerca al llegar a la Casa Materna «Arlen Siu», de Ciudad Darío, Matagalpa, donde se encontraba Jeimy Orellana Arancibia, de 22 años.
“Una tarde, cuando tenía 6 meses de embarazo, empecé a sentir dolor pues, mi parto se había adelantado. Mi hijo nació con un peso de 1,100 gramos, casi la mitad del peso ideal para un recién nacido”, expresó la joven madre.
A pesar que existían pocas probabilidades de vida para el pequeño, la joven mamá se aferró a Dios, y decidió esforzarse por su hijo llevándolo junto a su pecho las 24 horas del día, así el bebé cree está en el útero y su frágil cuerpo seguirá protegido.
“Quiero tenerlo cerquita todo el tiempo, darle mi calor y el pecho materno, para que vaya creciendo fuerte y sano; de mi depende que mi hijo sobreviva”, expresó con lágrimas en sus ojos.
A estos hogares temporales las futuras madres acuden cuando el embarazo está casi a término o si los médicos recomiendan reposo. Aquí tienen techo seguro, cama, comida y lo más importante, vigilancia permanente de los doctores y enfermeros.
La atención en las Casas Maternas es gratuita, y una de las particularidades es que se ubican muy cerca de centros hospitalarios.
Las embarazadas o puérperas aprenden técnicas de relajación, alimentación saludable, cuido para sus pequeños, prevención de la violencia.
En el caso de las mamás primerizas aprenden cómo amamantar y procurar el bienestar de ellas y sus bebés.