Con el corazón destrozado por el dolor, la señora María Luisa Reyes Obregón, pidió a las autoridades que se le aplique todo el peso de la ley a los sujetos Armando José Mendieta Quezada y Francisco Mendieta Quezada quienes le mataron a su hijo Darwin Antonio Benavides Reyes, de 34 años.
“Era yo la que llevaría al niño al colegio. Yo le dije no vayas. Y cuando iba en el bus de la ruta 111 a dejar al niño, no quiso entregar el celular ni los audífonos con el que escuchaba música, y le asestaron las cuchilladas”, reseñó doña María Luisa.
La señora dijo que “el niño miró cuando los delincuentes apuñalaron a su padre, quien horas después fue operado 2 veces pero no resistió”.
“Aunque él tuvo dos matrimonios nunca se apartó de mí y me decía: yo te voy a cuidar siempre hasta que te mueras, no será al revés”, recuerda la adolorida madre.
Doña María Luisa Reyes dijo que su hijo Darwin trabajaba para mantenerla a ella y ayudar a sus hijos.
Darwin Antonio Benavides Reyes, fue velado en la casa donde vivía con su mamá, en el barrio Jorge Dimitrov, lugar a donde lo llegaban a visitar sus dos hijos, de 7 y 14 años de edad.
Asimismo, agradeció a la Policía Nacional por haber capturado a los antisociales en Xiloá, hacia donde habían huido.