El doctor Carlos Alexis Molina Rugama, Juez de Distrito Penal de Audiencia de Jinotega, dejó presa y fijó audiencia inicial para el próximo jueves 12 de agosto, en contra de Paublina Sevilla Calderón, de 53 años, quien asesinó a una nieta de 10 años en Wiwilí, Jinotega, el pasado 25 de julio.
Inicialmente se creía que la niña se había ahorcado accidentalmente mientras jugaba en una hamaca, en una casa ubicada en la comunidad Boca El Corozal, pero la Policía descubrió que la abuela perversa la estranguló en venganza de su nuera con quien se había peleado ese mismo día.
Cuando el padre de la niña llegó a la casa, la perversa mujer lo engañó, diciéndole que la pequeña se había ahorcado jugando, pero durante las investigaciones policiales, la asesina explicó que ese día sostuvo una fuerte discusión con su nuera y en un acto de venganza decidió asesinar a su nieta.
La mujer explicó que esperó quedar sola con la niña, luego le dijo que se sentara en la hamaca y la ahorcó con el mismo mecate que sirve para sostenerla.
Una vez consumado el crimen, la abuela asesina dejó el cuerpo de la criatura de tal forma que pareciera que ella se había ahorcado accidentalmente.
La niña cursaba el sexto grado en la escuela de la comunidad en donde la comunidad educativa lamentó el sensible deceso.
El Ministerio Público presentó la formal acusación por el delito de parricidio, en tanto el judicial además de dejarla presa y fechar la audiencia inicial, ordenó que la acusada sea llevada al hospital Victoria Motta ya que afirma que tiene problemas de colon y gastritis.