El hombre fue impactado en el primer inning por una pelota bateada de foul por Josh Dondaldson, de los Azulejos de Toronto, y el partido se interrumpió brevemente mientras el espectador era atendido. El hombre regresó a su asiento una entrada después, sosteniendo en su hombro izquierdo lo que parecía una bolsa con hielo.
El aficionado se hallaba sentado cuatro filas detrás del campo al momento del incidente y Donaldson volteó a ver si el hombre se encontraba bien.
Una persona sentada cerca le entregó la pelota al espectador, que vestía una camiseta de Toronto. El aficionado abandonó su lugar por su propio pie, acompañado por personal médico. Varios espectadores en partidos de las mayores han sido lesionados por pelotas de foul y bates quebrados este año, lo que ha generado un debate sobre si los equipos deberían extender la red de protección.
En junio de este año, Tonya Carpenter, de 44 años, resultó lesionada gravemente en el Fenway Park tras ser golpeada por parte de un bate quebrado de Brett Lawrie, de los Atléticos de Oakland.
Antes en Boston, una mujer fue impactada en el codo izquierdo después que un bate se le resbaló de las manos a Brian McCann, de los Yanquis. A la mujer le fue proporcionada una bolsa con hielo y permaneció en su lugar. Otro aficionado en Boston fue llevado recientemente a un hospital después de que se fue de espaldas sobre un barandal cuando trataba de atrapar una pelota de foul y cayó en un pasillo de concreto.
**ESPN