Un hombre de 40 años participó del circuito cuando tuvo problemas respiratorios. Además, la campeona olímpica de esta disciplina aseguró que hubo falta de organización en el evento.
Alrededor de tres mil nadadores compitieron en una prueba de natación de kilómetro y medio que separa el sur de la península de Kowloon, y el este de la isla de Hong Kong. Algunos, en modalidad competitiva.
La mayoría de los competidores que se presentaron no eran atletas profesionales. En la mitad de la prueba saltaron las alarmas, ya que dos nadadores, de categoría popular, comenzaron a manifestar problemas de salud.
Los servicios de emergencia acudieron rápidamente a la zona en cuestión. Allí mismo intentaron reanimar a un hombre, de unos 40 años, que finalmente fue enviado al hospital, donde acabó muriendo.
Una mujer, de unos sesenta años, también fue trasladada a la clínica, tras quedar inconsciente durante la prueba. Todavía continúa en estado crítico, cabe destacar que ambos nadadores fueron rescatados aproximadamente a mitad del recorrido.
La carrera continuó y la modalidad competitiva la acabó ganando el estadounidense Charles Peterson. Por otro lado, La holandesa Sharon van Rouwendaal, medallista olímpica (oro) en la competencia de 10 kilómetros de los recientes Juegos Olímpicos de Río, fue la mujer más rápida.
«La organización pudo haber sido un poco más clara sobre la carrera. Sólo nos dijeron ‘nadad’, pero no sabíamos donde íbamos», sentenció la nadadora de 23 años.
Se trata de la primera muerte que reporta la competición, que desde 2011 volvió a reanudarse tras un paréntesis de treinta años por la contaminación de la bahía de Hong Kong. De hecho será la sede la Copa del Mundo los próximos 29 y 30 de octubre.